Ford anunció su asociación con la firma DowAksa y el Departamento de Energía de los Estados Unidos, para investigar la producción y el uso de fibra de carbono a gran escala en sus automóviles, lo que le permitirá desarrollar componentes de este material a bajo costo para integrarlos a sus vehículos, haciéndolos más ligeros y eficientes en el ahorro de combustible sin que pierdan rendimiento. El prototipo Ford GT con carrocería de fibra de carbono, así como el Mustang Shelby GT350R con rines de este material, ambos recién presentados en Detroit, son ejemplos de esta aplicación.

Esta asociación formará parte del nuevo Instituto de Innovación para la Fabricación de Materiales Avanzados, el cual fue creado por el gobierno de los Estados Unidos y está integrado a la Red Nacional para la Innovación en la Fabricación.


"La colaboración con DowAksa y nuestra participación en esta organización aumentan significativamente el alcance de nuestro trabajo", afirmó Ken Washington, Vicepresidente de Investigación y Estudios Avanzados de Ingeniería de Ford. "Tenemos una verdadera asociación de personas de gran talento, trabajando para llevar los materiales automotrices a un nuevo nivel".

El objetivo del Instituto y la asociación de Ford con DowAksa - un joint-venture entre Dow Chemical Company y el Aksa Kimya Sanayii Akrilik - es superar el alto costo y la disponibilidad limitada de fibra de carbono, y el desarrollo de un proceso viable de fabricación de alto volumen. La experiencia de Ford en el diseño, ingeniería y fabricación de alto volumen, complementa la fortaleza de DowAksa en la producción de compuestos de carbono, para crear piezas mucho más livianas que los componentes de acero, sin pérdida de resistencia.

Para obtener alta resistencia con un peso extremadamente bajo, los compuestos de fibra de carbono se han utilizado durante décadas en aviones y autos de carreras. Las propiedades de resistencia del material pueden ser adaptadas a un componente en particular para que sea más flexible o rígido, según sea necesario.


"Nuestro objetivo es desarrollar un material capaz de reducir significativamente el peso del vehículo y aumentar el ahorro de combustible para los clientes", afirmó Patrick Blanchard, Supervisor de Materiales de Ford. "La flexibilidad de la tecnología permite el desarrollo de materiales para todos los subsistemas de los vehículos, en toda la línea de modelos, con una reducción de peso de más del 50% en comparación con el acero".

La creación de vehículos más livianos es un componente importante del plan "Blueprint for Sustainability" de Ford, para reducir el consumo de combustible y las emisiones. El nuevo Fiesta con aplicaciones de acero al boro en su carrocería y la nueva pickup F-150 en aleación de aluminio de grado militar, son ejemplos de esta filosofía. El prototipo Fusion Lightweight, sedán de gran tamaño creado por Ford utilizando materiales como el aluminio, acero de alta resistencia, magnesio y compuestos de fibra de carbono en casi todos sus sistemas, alcanza un peso similar al de un Fiesta. El aprendizaje obtenido con este concepto puede llevar las tecnologías de bajo peso a una escala mucho mayor. Ford y DowAksa también están trabajando para reducir el consumo de energía y el costo de las materias primas en la producción de componentes de fibra de carbono, así como en el desarrollo de procesos de reciclaje.